El 8 de marzo no solo es una fecha para conmemorar la lucha por la igualdad de derechos, sino también para visibilizar el papel fundamental de las mujeres en la defensa del planeta. A lo largo de la historia, las mujeres han sido Guardianas del Bosque y del Futuro, protegiendo la biodiversidad, transmitiendo conocimientos ancestrales y liderando iniciativas de conservación. En ARBIO, somos parte de esta lucha y trabajamos cada día para preservar la Amazonía desde un equipo de mujeres comprometidas con su protección.
Guardianas del Bosque y del Futuro
Cuidar el bosque es cuidar la vida. En las comunidades amazónicas, las mujeres han sido históricamente guardianas del conocimiento tradicional, gestoras de los recursos naturales y transmisoras de saberes sobre la relación sostenible con la naturaleza. Su rol es clave en la protección de semillas, la regeneración del bosque y el manejo de recursos de manera equilibrada.
Sin embargo, también enfrentan grandes desafíos: acceso limitado a oportunidades de financiamiento, amenazas por defender su territorio y una brecha de género en espacios de decisión sobre conservación y sostenibilidad. A pesar de ello, siguen en primera línea, resistiendo y promoviendo nuevas formas de preservar el medio ambiente.
ARBIO: un equipo liderado por mujeres para proteger el bosque
En ARBIO, sabemos que la protección del bosque no es solo una tarea ambiental, sino una causa de justicia social. Como equipo de mujeres, trabajamos para conservar 916 hectáreas de bosque amazónico en Madre de Dios, enfrentando las amenazas de la deforestación y promoviendo la participación de la sociedad civil y el sector privado en la conservación.
Creemos en un modelo de financiamiento sostenible que nos permita seguir protegiendo este ecosistema único. Además, buscamos inspirar a más mujeres a involucrarse en la conservación y en la defensa de la Amazonía.
Celebrando el liderazgo de las mujeres por el planeta
Hoy reconocemos y celebramos a todas aquellas que con su trabajo, dedicación y compromiso cuidan la vida, y construyen un mundo más justo y sostenible. La conservación es un acto de esperanza y transformación, y el papel de las mujeres es esencial para asegurar un futuro armonioso con la naturaleza.