Nuestras madres comparten, desde el momento en el que nacemos, todo su conocimiento, amor y protección. ¿Sabías que con los árboles ocurre lo mismo? Aquí te contamos quién es el árbol Madre del bosque Amazónico.
El bosque como una familia
En el bosque, cada especie, cada individuo, y cada detalle juega un papel importante, por lo que no se puede pretender que el ecosistema siga funcionando si uno de estos componentes desaparece.
Se ayudan entre ellos y evolucionan juntos. Por ejemplo, ciertos animales se nutren de los frutos de los árboles, y en este proceso, ayudan a dispersar las semillas por todo el bosque.
Además, los individuos en el bosque son capaces de comunicarse entre sí, no solo la fauna, sino también los árboles. Resulta que ¡Toda la Amazonía se puede comunicar! incluso estando dos árboles a kilómetros de distancia. ¿Cómo?
La Wood Wide Web
Conectando las raíces de cada árbol en el bosque hay una gigantesca red de hongos. La familia fungi, de la cual aún nos falta mucho por investigar, ayuda subterráneamente a crear una internet propia: orgánica y natural. A esto se le ha llamado la Wood Wide Web.
Por el subsuelo, el bosque se encuentra interconectado, compartiendo información y permitiendo que las especies de árboles y plantas se comuniquen entre sí a largas distancias sobre diferentes amenazas. Ya sean sequías, plagas u otros desafíos, el bosque está al tanto de lo que ocurre en cada uno de sus rincones, y todo gracias a la wood wide web de la naturaleza.
lustración de la Wood Wide Web (Antonio Di Bacco)
El árbol Madre del bosque
Entonces, ¿Quién sería la madre del bosque? En este día de celebración dedicado a quienes nos dieron vida, consideramos que es simbólico celebrar a quienes mantienen este mundo en equilibrio: especies de grandes árboles, como el Shihuahuaco. También conocido como “árbol Madre”, pueden llegar a tener cientos de años de edad, acumulando mucho conocimiento y vivencias. El Shihuahuaco es uno de los pilares más importantes del ecosistema Amazónico, tal y como nuestras madres en casa.
En el bosque de ARBIO hemos encontrado árboles de entre 500 a 1300 años, ¿te lo puedes imaginar? Los árboles más antiguos ya estaban creciendo desde antes del imperio incaico, y han logrado crecer y prevalecer durante todo este tiempo ¡Una verdadera reliquia natural viva!
¡Gracias mamá! ¡Gracias Shihuahuaco!
Así como nuestra madre nos nutre cuando somos pequeños, los grandes árboles de la Amazonía como el Shihuahuaco nos provee a todos del líquido vital. Extrae agua del subsuelo a través de sus raíces, la transporta por su tronco hasta las hojas y, mediante la transpiración, libera al cielo vapor de agua. ¡Este proceso genera un gran flujo de humedad que provoca lluvia, alimentando nevados y los ríos que nacen de ellos!
Estas son algunas de las funciones que cumplen los grandes árboles centenarios de la Amazonía, permitiendo el equilibrio del ecosistema Amazónico y nuestro bienestar ¡es toda una madre!
Celebremos con todo nuestro amor a nuestra madre humana, a los árboles madre del bosque y a nuestra madre tierra.