Las plantas se especializan y evolucionan para atraer a los animales que las polinizan (ya sea polilla, murciélago, mariposa, ave, abeja o mamífero). De los animales polinizadores depende la subsistencia de las plantas (y viceversa). Por ejemplo, ciertas flores se abren solo cuando su polinizador está cerca, batiendo las alas y buscándolas ¡Que alucinante es la naturaleza!